Los proyectos de mediana y gran envergadura son susceptibles de ser afectados por cada punto porcentual de incertidumbre.
Una mayor incertidumbre se traduce en un mayor riesgo y unas condiciones de financiación menos favorables.
Combinamos los datos de Solargis basados en satélites con sus mediciones in situ para reducir la incertidumbre de la producción energética estimada y lograr estimaciones financieras más precisas.
Si dispone de mediciones in situ de alta calidad de la irradiación de un periodo de 9 a 12 meses, podemos adaptar nuestros datos de satélite para mejorar el sesgo general y el ajuste de las características estadísticas.
Nuestro servicio de adaptación in situ le proporcionará parámetros solares y meteorológicos mejorados localmente.
De este modo, podrá reducir al mínimo la incertidumbre del diseño de la central eléctrica y las simulaciones de rendimiento energético.
Los sensores instalados in situ son propensos a errores, lo que dificulta el proceso de evaluación de datos.
Tomamos las mediciones de tierra y aplicamos una serie de procedimientos para identificar errores, validar las mediciones y comprobar si faltan datos.
Sólo los datos que superan nuestras pruebas de control de calidad se utilizan en el servicio de adaptación al sitio para garantizar que el proceso no se vea afectado por datos de mala calidad.
En el proceso de adaptación al sitio utilizamos entradas del modelo que representan mejor las condiciones locales y recalculamos los datos.
Así obtenemos resultados con menor incertidumbre, tanto para los 30 años de historia del emplazamiento como para el futuro.
Como resultado, obtenemos datos más precisos con características adaptadas a las condiciones locales, reduciendo tanto los errores sistemáticos como los aleatorios. Los datos entregados también están mejor armonizados internamente (con mejor calidad y estructura).
Con más de 20 años de experiencia, más de 2.000 proyectos y pleno control de nuestros modelos patentados, el servicio de adaptación de emplazamientos nos permite ofrecer datos de una calidad incomparable.
El proceso de adaptación de emplazamientos ayuda a corregir problemas en los datos obtenidos por satélite, como la subestimación o sobreestimación de los niveles locales de aerosoles.
Esto es especialmente cierto cuando la magnitud de esta desviación no varía con el tiempo o tiene una periodicidad estacional.
Podemos adaptar la DNI y GHI obtenidas por satélite, la temperatura del aire y otros parámetros meteorológicos a las condiciones climáticas locales que no no son detectables en los datos originales y en las entradas de datos de parámetros atmosféricos obtenidos por satélite.
Basándonos en la disponibilidad de mediciones terrestres y utilizando nuestros algoritmos de posprocesamiento, validamos y mejoramos la precisión de parámetros como la temperatura del aire, el viento, la humedad relativa, las precipitaciones, el albedo, entre otros.
Así obtenemos resultados con menor incertidumbre, tanto para el historial completo de los últimos 30 años de datos de series temporales como para periodos futuros.